Embarcadero
Un gran entramado de maderos unidos a unos listones que se internan en el agua y dan acceso a una cantidad considerable de barcos, navíos e incluso botes. Los embarcaderos no tienen muy buena pinta. Muchos piratas vienen aquí después de salir del Abrazo del Barquero a donarle al mar como tributo parte de los líquidos ingeridos.
Los hombres de Pyke vigilan la zona haciendo patrullas. Pero como todas las cosas en este lugar, el dinero juega un papel crucial. Los navegantes con mayor aportación al gobernador disfrutan de un lugar más privilegiado en el embarcadero, y los hombres de Pyke, vigilan esas naves con más ahínco.
Observáis el embarcadero de arriba a abajo. Hasta que por fin dais con un barco que al parecer pertenece a algún pobre pirata con pocos reales en los bolsillos. Es un barco pequeño, pero suficiente como para zarpar y llevar un rumbo decente.
Os acercáis al navío y leéis su nombre escrito en la proa, “El Peregrino”. El nombre os da buena espina. Los peregrinos son bien recibidos.
No tardáis en memorizar el absurdo patrón que los guardias de Pyke dibujan en el embarcadero, por lo que colarse en El Peregrino es sumamente sencillo.
Pinchad en la escalera para subir al barco.